El primero tras una infracción de tráfico tuvo que ser interceptado al desobedecer el alto. Comenzando a insultar a los agentes al bajar del coche y emprender la huida.

El otro individuo estaba reclamado por estafa por un juzgado de Elche.

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El 20 de enero sobre la 01:20 horas una patrulla Centauro de la Brigada Nocturna observó a un vehículo realizar un giro no permitido en la Avenida de Santa Pola, por lo que dieron el alto al conductor para advertirle de la infracción.

Sin embargo, este no atendió el requerimiento, abandonando el lugar y debiendo ser interceptado en las cercanías de calle Orihuela.
Al bajar del turismo se dirigió a los agentes con insultos y amenazas, gesticulando ostensiblemente debiendo apartarse los actuantes para no ser golpeados.

De nuevo, el implicado aprovechó esta circunstancia para salir corriendo, si bien no pudo escapar y tuvo que ser reducido.

Gracias a las comprobaciones de Atestados se puede especular con que su intención fuera evadir la acción policial, ya que fue sometido a la prueba de alcoholemia y denunciado por superar la tasa legal.

En la noche de ese mismo día, en torno a las 23:50 horas, de nuevo gracias a la tarea preventiva mediante controles dinámicos, se interceptó a un vecino de Aspe, el cual se encontraba reclamado por un juzgado de Elche por un delito de estafa. El detenido de 52 años fue trasladado a dependencias policiales, y puesto a disposición judicial