El CBM Elche afronta el primer partido de la Copa Comunitat Valenciana ante el Elda Prestigio el miércoles, 28 de agosto, a las 20:00 horas, en Elda. El Elche parte como favorito de la Copa por ser el único equipo de la competición que milita en División de Honor Femenina.
El equipo ilicitano ha empezado la semana con la preparación del partido ante CBM Elda Prestigio, de la competición de la Copa Comunitat Valenciana. Las guerreras franjiverdes se enfrentarán a un equipo muy joven. El año pasado, con alguna jugadora juvenil, como Zaira Benítez, el Elda estuvo luchando hasta el final por meterse en la fase de ascenso y esta próxima temporada se encontrará en los puestos de arriba en su categoría. Elda suele defender en 6:0, con una defensa sólida y con matices defensivos que les va a venir bien a las franjiverdes porque tendrán que jugar de una manera precisa y circular el balón de una forma rápida. El Elche quiere enfrentarse a equipos con estas características ya que más tarde se encontrarán en División de Honor con defensas superiores a la ilicitana en cuanto a nivel antroronométrico.
El Elche jugará el partido a mitad de semana, el cuerpo técnico repartirá minutos entre todas sus jugadoras, y seguirán trabajando, centradas en el partido de la semana que viene ante el Mecalia Atl. Guardés, el primero de la Liga Guerreras Iberdrola 2019-20.
Por otro lado, las guerreras franjiverdes siguen con su pretemporada y este fin de semana se enfrentaron en un triangular al CD Polanens (11-26) y al Club Balonmano Pozuelo de Calatrava, de Ciudad Real (30-19). Joaquín Rocamora, técnico del Elche, utilizó el primer partido para dejar a las jugadoras de más peso fuera de la competición, ya que no estuvieron convocadas María Flores, Katia Zhukova, Ana Martínez, ni Jennifer Gutiérrez, además de las lesionadas. De esta forma, salvo Ivet Musons, ninguna jugadora pasada de los 20 años. Este partido les sirvió para ver que el nivel de exigencia de las jugadoras más jóvenes debe aumentar, necesitan coger el ritmo de los entrenamientos, y que tomen conciencia de lo que significa jugar en DHF, porque contra un equipo de la Liga Autonómica, en el descanso, el marcador reflejaba un empate a ocho. El resultado final está desvirtuado (11-26) porque el equipo ilicitano ha entrenado todo agosto y Santa Pola apenas lleva una semana de entrenamientos. Pero sirve de toque de atención a las más jóvenes para que den un plus más, para ser jugadoras que aporten en la máxima categoría.
En el segundo partido, Rocamora felicitó a Pozuelo porque, a pesar del resultado final (30-19), hasta el minuto 40 tan solo tenían una mínima desventaja de dos goles. El Elche jugó este partido de forma correcta pero notaron el cansancio de las nueve sesiones de la semana pasada y esto provocó imprecisiones en situaciones claras de lanzamiento. Esto les penalizó mucho e hizo que el partido estuviera igualado durante mucho tiempo. Sin embargo, Rocamora considera que la lectura del partido fue positiva porque el equipo fue capaz de ser sólido y trabajó como debía. La igualdad del marcador en los primeros minutos fue debido al cansancio y a un buen trabajo de Pozuelo, un equipo que puede estar luchando por meterse en la fase de ascenso en la próxima temporada.
