La semana pasada Jacobo Ramos volvió a fotografiar hasta tres ejemplares diferentes de malvasia cabeciblanca en el Clot de Galvany, tras los 2 ejemplares localizados en enero de este año, también en el Clot de Galvany.
Se trata de un impacto detectado por vez primera en las lagunas del sur de Córdoba en 2006 y 2007, donde se registraron cuatro casos de malvasias muertas con gomas elásticas en pico y cuello. Se llegó a la conclusión de que habían llegado hasta allí a través de las garcillas bueyeras (Bubulcus ibis), que formaban un dormidero en estas lagunas y allí regurgitaban las gomas ingeridas en un vertedero próximo confundiéndolas con lombrices. Posteriormente se enganchan en las malvasias, al sondear con su pico los fondos limosos del humedal (Moreno Arroyo et al., 2009).
En el Clot no ha llegado a detectarse la muerte de ningún ejemplar, aunque no deja de ser preocupante este impacto en una población cada vez más mermada por el deterioro ambiental de El Hondo, hasta fechas recientes uno de los principales humedales para la especie en España.
Bibliografía:
Moreno Arroyo, B., Torres Esquivias, J. A., Vega Pozuelo, R. F. (2009) Influencia de las gomillas elásticas sobre la conservación de malvasía cabeciblanca (Oxyura leucocephala): manejo y control en las lagunas del sur de Córdoba. Oxyura. Revista sobre las zonas húmedas, 12 (1): 61-70
Fuente.: AHSA