ASAJA Alicante y ASAJA Andalucía han hecho un llamado urgente a las autoridades para que investiguen las ofertas de compra a precios bajos realizadas por la industria transformadora de cítricos, acusada de actuar en detrimento de los agricultores. Estas prácticas, según las organizaciones, incumplen la Ley de la Cadena Alimentaria, poniendo en riesgo la viabilidad económica de cientos de citricultores.

A pesar de que la demanda de zumo de naranja sigue en aumento, impulsada por un déficit global de producción, los agricultores españoles reciben ofertas de apenas 15 céntimos por kilo de naranja destinada a zumo, un precio que no cubre los costes de producción. Esta situación contrasta con el precio al consumidor, que en supermercados oscila entre 2,5 y 4 euros por litro, llegando incluso a los 6 euros en su versión recién exprimida.

El presidente de ASAJA Alicante, José Vicente Andreu, considera que esta falta de equilibrio en el mercado es perjudicial para todos los eslabones de la cadena, excepto para la industria transformadora. «Reclamamos precios justos para los agricultores, que deberían recibir entre 30 y 35 céntimos por kilo, y también para los consumidores, que deberían pagar un precio más razonable por el zumo», afirmó.

Ricardo Serra, líder de ASAJA Andalucía, insiste en la necesidad de una intervención del Ministerio de Agricultura para garantizar la sostenibilidad del sector. «Sin precios rentables, el futuro de la citricultura está en juego. No podemos permitir que el eslabón más importante, el productor, se vea obligado a abandonar sus campos», destacó.

Ambas organizaciones agrarias han anunciado que presentarán una denuncia ante la Agencia de Información y Control Alimentarios (AICA) para investigar estas prácticas y asegurar que la Ley de la Cadena Alimentaria se cumpla en todo el sector cítrico.