El Ayuntamiento de Elche impulsa el futuro Conservatorio en Candalix entre debates patrimoniales

El Ayuntamiento de Elche ha dado luz verde al proyecto del nuevo Conservatorio de Música en la parcela de Candalix, una decisión que ha generado amplios debates en el seno de la comunidad. Con el apoyo decidido de PP y Vox y la abstención del PSOE, se ha aprobado el cambio de uso del suelo mediante la modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), transformando un área de uso administrativo e institucional en un núcleo educativo y cultural.

El equipo de gobierno local argumenta que esta transformación «completaría un fragmento inacabado de la ciudad». Actualmente, el solar en cuestión se utiliza como aparcamiento en superficie, lo que afecta negativamente a la imagen urbana de la zona. La intención es dotar a la zona de una nueva vida cultural, integrando un complejo de gran envergadura que potencie la oferta educativa y artística de Elche.

Sin embargo, la aprobación del proyecto se ha llevado a cabo sin contar con el informe favorable del Servicio Territorial de Cultura de la Generalitat Valenciana, ni haberse realizado la intervención arqueológica obligatoria. Desde agosto de 2024, la Consejería de Cultura exigía la elaboración de una memoria de impacto patrimonial y la ejecución de una actuación arqueológica, dada la posible presencia de un refugio de la Guerra Civil ubicado bajo la parcela. El Ayuntamiento remitió toda la documentación requerida en enero de 2025 y se encuentra a la espera de la respuesta oficial.

La crítica no ha tardado en llegar desde la oposición. El PSOE ha calificado la ubicación del proyecto como una “ubicación envenenada”, subrayando los riesgos de conflictos con el patrimonio histórico de la ciudad. Se hace hincapié en que, en 2022, ya se había presentado y aprobado un proyecto alternativo para ubicar el Conservatorio en la avenida de la Unesco, junto al colegio Clara Campoamor, opción que no hubiese requerido modificar el PGOU ni realizar complejas evaluaciones arqueológicas.

El alcalde Pablo Ruz ha tratado de disipar la inquietud pública, asegurando que los trámites administrativos continúan avanzando con celeridad y que el calendario previsto para la ejecución del proyecto no se verá afectado. El complejo, que abarca 5.470 metros cuadrados, se diseñará en tres pabellones de tres plantas, interconectados mediante pasarelas, e incluirá un auditorio con capacidad para 400 personas, cincuenta aulas, varias salas de ensayo, despachos y una cafetería, lo que representa una apuesta ambiciosa por la cultura y la educación en Elche.

A pesar del entusiasmo del equipo de gobierno, la Conselleria de Cultura ha subrayado que no podrá autorizar definitivamente el cambio de uso del suelo hasta disponer de la evaluación arqueológica preceptiva. En consecuencia, el futuro del Conservatorio de Música en Candalix permanece a la espera de dicho informe, que será determinante para asegurar el respeto y la preservación del patrimonio histórico en esta zona emblemática.