Muere Julio Anguita, líder histórico de Izquierda Unida, a los 78 años
Fue ingresado el 9 de mayo en estado crítico en la UCI tras sufrir una parada cardiorespiratoria
Bajo su liderazgo IU logró sus mejores resultados históricos pero las diferencias internas motivaron su salida
El excoordinador federal de Izquierda Unida (IU), Julio Anguita, ha muerto este sábado a los 78 años, según ha confirmado el hospital Reina Sofía de Córdoba, en cuya unidad de cuidados intensivos (UCI) se encontraba ingresado en estado crítico desde el pasado 9 de mayo tras sufrir una parada cardiorespiratoria en su domicilio de la capital cordobesa.
Anguita había sufrido previamente varios ataques al corazón, por lo que tuvo que ser intervenido hasta en dos ocasiones por problemas cardíacos -en 1993 y 1998- e incluso publicó un libro, ‘Corazón rojo. La vida después de un infarto‘, donde relataba su propia experiencia.
Los restos mortales del político han sido trasladados al Salón de Plenos del Ayuntamiento de Córdoba, donde se ha instalado la capilla ardiente, cerrada al público a causa de la crisis del coronavirus, pero a la que han acudido familiares y dirigentes locales.
El Ayuntamiento de Córdoba ha habilitado un libro de condolencias virtual en la página web municipal para que los ciudadanos que no pueden acudir a la capilla puedan mostrar su respeto y homenaje al que fue el primer alcalde de la ciudad tras la Transición.
El coche fúnebre ha llegado escoltado por una patrulla de la Policía Local y ha sido recibido en la entrada por todos los alcaldes de Córdoba de la democracia, a excepción de Andrés Ocaña, ya fallecido, y por algunos cordobeses, que han aplaudido al que fuera su alcalde. El Ayuntamiento platea poner el nombre de Julio Anguita a una calle o a un espacio público de la ciudad andaluza.
El ‘califa rojo’
Hijo de militar, nieto y bisnieto de guardia civil, nació en Fuengirola (Málaga) en 1941 pero se traladó a Córdoba en su infancia, ciudad de la que se convertiría con los años en un referente.
Tras hacer el servicio militar en las milicias universitarias, se preparó para ingresar en la Academia General Militar de Zaragoza, ciudad donde estrudió Magisterio. Posteriormente, se licenció en Historia Moderna y Contemporánea por la Universidad de Barcelona y ejerció como maestro nacional en Montilla, Alicún de Ortega (Granada), Nueva Carteya y Córdoba capital, donde también fue profesor de secundaria en el IES Blas Infante.
En 1972 ingresó en el Partido Comunista de España (PCE), del que llegaría a ser secretario general, y en 1977 accedió al Comité Central del partido en Andalucía (PCA).
Su primer cargo institucional fue el de alcalde de Córdoba, al que accedió ej 1979 gracias a un pacto entre el PCE, el PSOE y el PSA. Cuatro años después, en las municipales de 1983, fue reelegido por mayoría absoluta, lo que le valió el apoyo del ‘califa rojo’, ya que era el único alcalde comunista de una capital española.
En el Congreso del PCE de 1982 entró a formar parte del Comité Central y en el Comité Ejecutivo y, desde 1984, fue candidato a la presidencia de Andalucía, en cuyo parlamento se sentaba ya como diputado desde 1982. La decisión de concurrir a las elecciones andaluzas provocó su salida voluntaria de la alcaldía cordobesa, logrando Anguita el acta de diputado provincial e Izquierda Unida, que se estrenó en aquellos comicios como marca electoral, 19 escaños.
En febrero de 1988, tras la dimisión de Gerardo Iglesias, fue elegido secretario general del PCE y un año después se convirtió en coordinador general de IU, con quien fue candidato a la Presidencia del Gobierno, llevando a la coalición a obtener sus mejores resultados electorales en las generales de 1989, 1993 y 1996, año en el que alcanzó el 10% de los votos y los 21 diputados en el Congreso.
«Programa, programa, programa»
En esa etapa su posición política se caracterizó por supeditar cualquier tipo de pacto con el PSOE a acuerdos programáticos concretos, haciendo famoso el lema «programa, programa, programa», y defender tanto la teoría de las «dos orillas», en la que equiparaba las posiciones de PP y PSOE, como el ‘sorpasso’, según la cual IU debía aspirar a superar al PSOE para convertirse en fuerza hegemónica de la izquierda en España.
Anguita dejó la Secretaría General del PCE en diciembre de 1998, donde fue sucedido por Francisco Frutos, que a finales de 1999 asumió la candidatura de IU a la Presidencia del Gobierno, a la que renunció Aguita alegando razones de salud tras sufrir un problema cardiovascular.
Las diferencias internas por la decisión de concurrir junto al PSOE en aquellas elecciones llevaron a que meses después Anguita también dejara el cargo de coordinador general de IU en la VI Asamblea, siendo sustituido por Gaspar Llamazares, para volver a su actividad docente en Córdoba, de la que se jubiló el curso 2003-2004.
En los años posteriores se siguió distanciando de las posiciones políticas del PCE y de la dirección de IU y llegó a impulsar la creación de plataformas como el Frente Cívico Somos Mayoría, protagonizando en paralelo acercamientos al entorno de Podemos desde el primer éxito de la formación morada en las elecciones europeas de 2015.
Reacciones en la política española
La muerte de Anguita ha provocado un aluvión de reacciones en la política española, incluyendo la del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quien ha calificado al líder histórico de IU de «hombre coherente, honesto y crítico, que defendió de manera incansable la igualdad y la justicia social».
También el coordinador federal de IU, Alberto Garzón, con quien Anguita mantuvo una estrecha relación, ha lamentado la pérdida del «más grande, nuestro amigo, nuestro camarada», mientras que el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, ha señalado que con la muerte de Anguita «no solo se nos va un referente ético, se nos va nuestro mejor referente político«.
Además, el presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno (PP) ha expresado en Twitter sus «respetos y reconocimiento» hacia Julio Anguita «por su aportación a la política en España.
La familia de Julio Anguita ha mostrado, a través de un comunicado, su agradecimiento por el «cariño mostrado» en la últimas semanas, ante la «imposibilidad de dar respuesta personalmente» ante las «innumerables muestras de apoyo». «Toda la fuerza que en estos días habéis enviado a Julio, nos acompaña y reconforta ahora a nosotros. Gracias, de corazón», ha expresado la familia.
Fuente: RTVE
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