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La unidad ilicitana fue creada en 2012, siendo pionera en la Comunidad Valenciana
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La unidad forma parte de un proyecto español pionero en Europa que reconoce el cumplimiento de los máximos estándares de calidad asistencial
La Unidad de Insuficiencia Cardiaca, adscrita al Servicio de Cardiología del Hospital General Universitario de Elche, ha conseguido la certificación de excelencia como Unidad Especializada de Insuficiencia Cardiaca otorgada desde la Sociedad Española de Cardiología por la calidad asistencial que presta el servicio ilicitano.
De esta forma, la unidad pasa a formar parte de un proyecto español pionero a nivel europeo en la acreditación nacional que reconoce el cumplimiento de los máximos estándares de calidad asistencial y el uso eficiente de los recursos disponibles.
Insuficiencia cardíaca
La insuficiencia cardíaca es una enfermedad que impide el correcto bombeo del corazón, haciendo que no llegue suficiente riego sanguíneo al organismo y que se acumulen los líquidos que el corazón no bombea adecuadamente. Es la primera causa de ingreso hospitalario en mayores de 65 años en el mundo occidental, con una alta tasa de mortalidad y una disminución significativa de la calidad de vida de estos pacientes.
La disponibilidad de nuevos tratamientos farmacológicos y dispositivos intracardiacos ha mejorado de manera significativa su supervivencia y ha reducido las necesidades de ingresos hospitalarios por descompensación.
Unidad ilicitana
La Unidad de Insuficiencia Cardiaca del hospital ilicitano cuenta con una larga trayectoria en la asistencia a pacientes cardiológicos. Fue creada en 2012 siendo pionera en la Comunidad Valenciana y, a lo largo de estos años, ha servido de modelo para otras unidades en la provincia.
Con el apoyo de la dirección del Hospital de Elche y la implicación de todo el servicio de Cardiología, la unidad ha ido desarrollándose, ampliando su cartera de servicios y permitiendo el manejo integral del paciente con insuficiencia cardiaca con la colaboración de otras especialidades médicas. Todo ello ha permitido obtener uno de los certificados de Unidad Especializada de Insuficiencia Cardiaca con los que cuenta la Comunidad Valenciana.
Según el Dr. Antonio García Honrubia, responsable de la unidad “El periodo tras el alta de un paciente con Insuficiencia Cardiaca es el periodo más crítico para evitar reingresos hospitalarios, sobre todo los pacientes que presentan disminución de la fuerza del corazón. El paciente tiene que tomar conciencia de su enfermedad y requiere un seguimiento muy estrecho y por supuesto, de una amplia educación para la salud en todos los aspectos de su patología. Todo ello permite que se reconozcan los síntomas de descompensación de forma precoz, favoreciendo el inicio de tratamientos intravenosos en la unidad de forma ambulatoria y evitando así reingresos hospitalarios”.
Por su parte, el Dr. Pedro Morillas Blasco, jefe de servicio de Cardiología explica que “Está más que demostrado que cada ingreso por Insuficiencia Cardiaca que presenta el paciente aumenta su mortalidad, por lo que es fundamental que podamos aplicar los mejores tratamientos existentes a nuestros pacientes y reducir así este riesgo. Esto hace imprescindible la existencia de estas unidades en los grandes centros hospitalarios, centradas en una atención integral y multidisciplinar del paciente y donde resulta clave contar con equipos de apoyo como Rehabilitación Cardiaca, Medicina Interna, Endocrinología, Nefrología, Urgencias, Atención Primaria, Salud Mental y Cuidados Paliativos”.
“La certificación que hemos recibido por parte de la Sociedad Española de Cardiología reconoce la gran labor que se desarrolla en nuestro servicio y constituye una garantía de calidad asistencial para los pacientes con insuficiencia cardiaca de nuestro departamento”, asegura el especialista.
Los profesionales de la unidad que la integran, el Dr. Antonio García, La Dra. Nuria Vicente y el Dr. Pedro Morillas, así como las enfermeras Milagros Quintana y Natividad Collado refieren sentirse orgullosos por el reconocimiento, con ganas de seguir trabajando y formándose para prestar el servido más completo e integral que requieren estos pacientes, aún más si cabe en estos tiempos de pandemia donde el autocuidado guiado por profesionales cada vez adquiere más valor.
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